
En otros post anteriores les había contado del sueño de mi esposa, de nuestro supuesto paraíso; que lo pueden leer aquí.

También les mostré lo hermoso que es este lugar en otro post que pueden leer aquí.
En esta oportunidad quería contarles que pasamos un día en ese maravilloso lugar.

Es tan bonito que realmente parece que estas en el paraíso, a pesar de que lo conocimos en invierno no dejaba de asombrarnos tanta belleza.
Este sitio queda en Bélgica, en la ciudad de Gante.

No fue difícil de llegar desde Bruselas, la capital del país y la dueña de la gran plaza más bella del mundo; tan solo tomamos un tren que nos dejó en esta preciosa ciudad dotada de muchos tranvías que nos llevaron a conocer cada rincón de esta.

Nos sentíamos plenos, con mucha felicidad de estar allí, de cumplir un sueño quizás con un poco de fantasía, pero no dejaba de ser un sueño al fin.

Fuimos hasta la intercepción de los ríos Lys y Escalada, hundimos nuestras manos en esa agua y en ese momento sentíamos que tocábamos el cielo con ellas...