¿Sabes cómo llaman al cuarto de libra con queso en París? Si al leer esta frase, se te escapa una sonrisa y contestas: «Royale con queso», posiblemente seas, como yo, fan o seguidor de Quentin Tarantino y hayas visto Pulp Fiction en más de una ocasión. Cada cierto tiempo vuelvo a verla y cada vez me parece todavía más genial que la anterior.

Película de 1994, escrita y dirigida por Quentin Tarantino. Su nombre deriva de las revistas de literatura pulp y las novelas gráficas hard boiled que se caracterizaban por su violencia y su dura narrativa. Fue el segundo largometraje del director y su consagración definitiva, tras el éxito conseguido con su primera película, Reservoir Dogs, en 1992. El estreno de la cinta se produjo en el Festival de Cannes, donde logró la Palma de Oro. También obtuvo el Globo de Oro al mejor guion y fue nominada a siete categorías de los Premios Oscar, las cuales incluían mejor película y mejor director. Finalmente, solo consiguió el Oscar al mejor guion original.
En el año 2013 fue considerada «cultural, histórica y estéticamente significativa» por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos y fue elegida para su preservación en el National Film Registry. Es considerada como una película de culto y ha dejado una gran influencia que se puede apreciar tanto en otras películas como en series o en la cultura popular. Podría decir, metiéndome en el papel de Vincent Vega o de Jules Winnfield, que la película es «jodidamente buena». Una de mis favoritas, sin duda.
De todos los aspectos a destacar, que son muchos, me gustaría empezar por el guion. Tarantino lo escribió en una libreta y a mano cuando se encontraba en Ámsterdam. Se trata de una serie de historias cortas, contadas de manera independiente y desordenada, que confluyen todas entre sí. Historias de gánsteres. Los diálogos, largos, son una parte fundamental de la película y muchos de ellos, como el del cuarto de libra que puse al principio de la reseña, han quedado para la historia del cine.
La cinta tiene innumerables secuencias icónicas, como el baile de Vincent Vega y Mia Wallace, Jules recitando el pasaje bíblico de Ezequiel 25:17, Pumpkin, también llamado Ringo, atracando la cafetería junto a Yolanda (Honey Bunny), la sobredosis de Mia, la llegada del señor lobo o mi favorita, Butch escogiendo arma para liberar a Marsellus Wallace en la tienda y todo lo que ocurre a continuación. De hecho, para mí, toda la película es icónica. Cada plano, cada secuencia, cada diálogo…, la música. Simplemente espectacular. La obra no está exenta de escenas cómicas, donde Tarantino refleja su peculiar humor, que a mí me encanta.

El reparto es sencillamente magnífico. John Travolta encarna a Vincent Vega, un gánster muy peculiar que está de vuelta en Los Ángeles tras su estancia en Europa. Después de interpretar a Tony Manero en Fiebre del sábado noche y a Danny Zucko en Grease, Pulp Fiction supuso el resurgir de este actor, que llegó a ser un icono mundial a finales de los 70. Por el papel de Vincent Vega fue nominado a mejor actor en los Premios Oscar. Si el papel de Travolta es bueno, el de Samuel L. Jackson no se queda atrás. Un Samuel L. Jackson que se viste de Jules Winnfield, un gánster duro, de mirada penetrante, que tras un incidente en un día de trabajo, decide abandonar esa vida para dedicarse a los demás. Pulp Fiction catapultó la carrera de Samuel L. Jackson que hasta la fecha había participado en películas como Juego de patriotas, Uno de los nuestros o Parque Jurásico, interpretando papeles menores. Por este trabajo fue nominado al Oscar como mejor actor de reparto y ganó el premio BAFTA en la misma categoría.
Otra actuación a destacar es la de Bruce Willis, que da vida a Butch Coolidge, un boxeador, en el ocaso de su carrera, que participa en el amaño de un combate. Willis logró la fama con la serie Luz de Luna, donde interpretó al detective David Addison. Más tarde encarnó a uno de sus personajes más emblemáticos y recordados por el público, John McClane, en la Jungla de Cristal. Con el cartel de estrella consagrada, se puso a las órdenes de Tarantino para meterse en la piel de este boxeador. Interviene en mi parte favorita de la película, en la historia llamada «El reloj de oro».
Si antes comenté que Pulp Fiction catapultó la carrera de Samuel L. Jackson, también hizo lo propio con la de Uma Thurman. Ella encarna a Mia Wallace, la mujer de Marsellus. Una noche, que parecía tranquila, Mia va a cenar con Vincent, que ha de cuidar de ella por petición expresa de su marido, y en un momento dado, todo se les va de las manos. Con este papel, Uma Thurman fue nominada al Oscar a la mejor actriz de reparto y nos regaló ese baile junto a Travolta en el concurso de Twist del Jack Rabbit Slims.
Hablando de Marsellus Wallace, hay que destacar el papel de Ving Rhames, actor estadounidense que interpreta al capo de la organización. Rhames empezó a hacerse popular a partir del año 85, al intervenir en películas de Brian de Palma o Wes Craven.
Otro papel destacable en Pulp Fiction es el de Harvey Keitel, que encarna a Winston, «el señor lobo», un empleado de Marsellus Wallace que trabaja «resolviendo problemas». Keitel había trabajado con Martin Scorsese en su primer largometraje ¿Quién llama a mi puerta? y compartirían set en Malas calles, Alicia ya no vive aquí, Taxi Driver y La última tentación de Cristo. Después de su aparición en Reservoir Dogs, Tarantino volvió a contar con él para su nuevo proyecto.
Habría que mencionar también a Tim Roth en el papel de Pumpkin, a Amanda Plummer en el de Yolanda y a Christopher Walken interpretando al Capitán Koons, que le entrega el reloj de oro a Butch.
Por último me gustaría hablar sobre la magnífica banda sonora de la película. Tal vez se podría escribir un artículo hablando únicamente de ella. Se nota la pasión que profesa Tarantino por la música y como la encaja a la perfección en las secuencias. Como cuando arranca la película, tras la escena de la cafetería, y suena «Misirlou» de Dick Dale, junto a los títulos de crédito. No solo en Pulp Fiction, la obra de Tarantino está repleta de unas bandas sonoras espectaculares. En esta cinta podemos escuchar, entre otras, «Jungle Boogie» de Kool & the Gang, «Son of a Preacher Man» (interpretada por Dusty Springfield), «Let´s Stay Together» de Al Green, «You Never Can Tell» de Chuck Berry o «Comanche» de The Revels.

En conclusión, Pulp Fiction es la película que más me gusta de este director y creo que es de visionado obligatorio si eres aficionado al buen cine o simplemente quieres pasar un buen rato viendo una magnífica peli con una excelente banda sonora.