Hoy volé sobre tu casa,
limpia,bonita,impecable,
y sentí en mi corazón
una alegría inusitada.
Aterrice en tu jardín
de flores olor a azahar,
y sentí una paz interior
que no supe jamás.
Hoy soy feliz por tener
un trozo de ti a mi lado,
y pretender que tu casa
sea de nuestro agrado.
Seré rey de reyes
apoyado en tu regazo,
y sentiré el calor tuyo
cuando esté entre tus brazos.
Hoy la luna nos mirará,
asombrada y enamorada
de nosotros,
pues sabrá que nuestro amor
perdurará,
más allá de lo humano.
José Pedro