El ADN es uno de los elementos más relevantes en las investigaciones criminales, cuando hablamos de ADN, podemos pensar que este es como un "DNI" que se encuentra en el núcleo de nuestras células y que contiene la información genética que determina nuestras características físicas y biológicas y puede ser utilizado para identificar a una persona o para establecer su relación con una muestra biológica encontrada en la escena del crimen.
Esta secuencia de ADN es lo que se utiliza en la ciencia forense para identificar a los sospechosos de un delito o para confirmar la relación biológica entre individuos porque es única en cada persona ¡excepto en el caso de los gemelos idénticos!
Dicho esto ¿Qué pasa con los gatos?
Un estudio reciente de Forensic Science International: Genetics Supplement Series ha examinado la transferencia de ADN humano a gatos y la persistencia del ADN humano en ellos:
Los resultados del estudio revelan que el ADN humano puede transferirse a los gatos y persistir en ellos durante un período de tiempo pero esto no acaba aquí.
¿Qué ocurre si el sospechoso no ha tocado a mi gato?
Aquí entra en juego el ADN táctil que es aquel que se recupera de una superficie que no ha sido tocada directamente por el sospechoso conocido, (aunque es cierto que no es del todo concluyente para la identificación de una persona) sí se puede utilizar como complemento de otras pruebas o para descartar a individuos sospechosos y aquí es donde también los gatos pueden ser útiles, ya que las células de la piel de una persona o pelos que se han caído pueden adherirse al pelaje del animal.
Pero no, tampoco acaba aquí el asunto.
Un dato muy importante que reveló el estudio:
Se utilizaron 20 gatos de 15 hogares y se recolectaron muestras de pelo de los gatos y ADN de los humanos.
Los resultados mostraron que el ADN humano se encontró en el 80% de las muestras de los gatos, y se pudieron generar perfiles de ADN del 70% de los gatos que se vincularon con un humano.
En seis de los gatos se detectó ADN humano desconocido ( personas fuera del hogar.
Pero como dato muy curioso:
En uno de los hogares del estudio había dos gatos, uno era calvo y el otro muy peludo, pues bien parece ser que ¡solo el gato calvo tenía ADN humano d!
En uno de los hogares del estudio había dos gatos, uno era calvo y el otro muy peludo, pues bien parece ser que ¡solo el gato calvo tenía ADN humano de personas fuera del ámbito del hogar!
Lo que implica que los investigadores no están seguros de cómo se transfiere el ADN humano a los gatos y cuánto tiempo persiste en ellos, por lo que aún queda mucho que investigar por delante.
LOS GATOS QUE HAN RESUELTO CRÍMENES:
- La Universidad de Leicester creó en 2013 la primera base de datos de ADN de gatos en el Reino Unido para ayudar en investigaciones criminales. La base de datos se utilizó para condenar al dueño de un gato por asesinato después de encontrar pelos de gato en una cortina que envolvía el torso desmembrado de un hombre. El gato se llamaba Tinker.
- En la isla Prince Edward en Canada, se llevó a cabo un juicio por el asesinato de Shirley Duguay una joven y la principal prueba en contra del exnovio de la víctima, Douglas Beamish, fue precisamente el ADN de un gato. La policía encontró pelos blancos en una chaqueta de cuero que pertenecía a Beamish. Al analizar los pelos, se descubrió que pertenecían a un gato, y se descubrió que Beamish tenía un gato blanco llamado Snowball. Este fue el primer caso ( o al menos así lo consideran) donde se aceptó la prueba de ADN animal en un juicio.
Referencias: Is there human DNA on cats - ScienceDirect
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