La mayoría de las personas desconocen que los mosquitos se alimentan del néctar de las flores y del jugo de las frutas. Antes de continuar, no son insectos polinizadores y no podrían sustituir la esencial función de las abejas y sus parientes en el entorno natural, por si alguien estaba pensando en ello.
La cuestión es que no todos los mosquitos extraen sangre. De hecho, solamente las hembras lo hacen y es por un motivo muy especial: la formación de sus huevos.
¿Por qué necesitan la sangre?
El motivo es la reproducción. Una hembra de mosquito puede vivir su vida sin picar a ningún animal. El problema es que necesita hacerlo para reproducirse. Una dieta basada en néctar contiene muchos azúcares, pero apenas le aporta proteínas. Estas debe tomarlas del medio para poder formar los huevos y traer una nueva generación.
Por otra parte, los machos no tienen esa necesidad, y su alimentación es exclusivamente herbívora. Como dato curioso, su probóscide (el aguijón que contienen en la cabeza, que actúa como “boca”, por el que succionan los líquidos para alimentarse) es demasiado débil para atravesar la piel humana. Al no necesitar hacerlo, la evolución no les ha provisto de una probóscide capaz de perforar la piel.