
El nuevo sistema de inteligencia artificial Dagger analiza múltiples datos para predecir con precisión los efectos de las tormentas solares, ayudando a prevenir sus posibles efectos catastróficos. La humanidad no está preparada para enfrentarse a una catástrofe como el efecto de un evento Carrington o, aún peor, un evento Miyake. La reacción en cadena provocada por una tormenta solar extrema causaría el colapso de la civilización actual, destruyendo sistemas eléctricos y electrónicos a nivel mundial que tardarían décadas en recuperarse, enviándonos de vuelta al medioevo. Pero hoy tenemos una nueva arma para mitigar su impacto potencial: una nueva inteligencia artificial capaz de predecir con precisión los efectos de estas erupciones solares para alertar a los gobiernos del impacto con algunas horas de antelación.