seguirle el paso a los días
girar la cara a la ruina
dormir a pierna tendida
sentir que no hay quien te impida
coger el aire que silba
robando el hueco a la intriga
y ser en calma encendida
un ente que, nada más, viva.
Como bien dice el título, este poema es el primero de una serie de no sé muy bien cuantos pero imagino que de muchos, que serán absolutamente improvisados. Así, daré rienda suelta a mi imaginación instantánea, expresando sin tapujos lo que en ese momento mi inconsciente expresaría poéticamente.
Empezamos con ocho versos octosílabos que expresan positividad, valor y/o fuerza.
Espero que os agrade. ¡Un saludo, Mambiers!