
Es una paciente joven que ha tenido previamente una infección respiratoria viral (mialgias y tos seca) y ahora inicia con un cuadro compatible con un hipertiroidismo (taquicardia, fiebre, temblor, sudoración) asociado a dolor anterocervical.
Este cuadro es típico de una tiroiditis subaguda, puesto que es un ataque tras una infección respiratoria a nuestro tiroides lo que desencadena dolor (por ese “ataque”) e hipertiroidismo por liberación masiva de hormona tiroidea.
Con respecto al resto de opciones:
La tiroiditis linfocitaria (generalmente equiparada a la enfermedad de Hashimoto) es una patología que causa un hipotiroidismo lentamente progresivo sin cuadro desencadenante y sin presentar una fase de hiperfunción tiroidea
La tiroiditis aguda o infecciosa, normalmente, constituye una infección bacteriana de la glándula tiroidea, lo que se manifiesta como una glándula tiroidea dolorosa (solo en una porción en lugar de forma generalizada e irradiada) con aumento de tamaño y de la temperatura local (cosas ausentes en nuestra paciente). Además, suele asociar fiebre muy alta (podemos equipararlo a un absceso en cualquier otra localización).
Por último, la enfermedad de Graves-Basedow, es la principal causa de hipertiroidismo primario de etiología autoinmune. No presenta un factor desencadenante como en nuestro caso y la glándula tiroidea no es dolorosa (en alguna ocasión puede haber aumento generalizado del tamaño glandular, pero no es lo habitual).